
Es un hecho, el vino es uno de los mejores quemagrasas que existen. Según de la Universidad Estatal de Oregón y publicado en la revista Journal of Nutritional Biochemistry, el vino, en consumo moderado, estabiliza el metabolismo y contribuye a optimizar la salud del hígado graso.
Beber vino y conservarlo en casa es todo un mundo de términos y protocolo, pero mejora los trastornos metabólicos asociados al exceso de peso. De hecho, comer uvas también influye positivamente en esta actividad.
¡Qué noticia tan alentadora! Y a nosotros que nos encanta una copa de vino para amenizar nuestras conversaciones. Así que vamos a encender nuestro reproductor y colocar nuestro playlist al son del vino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario