
Ingredientes
Para la polenta:
Queso parmesano Cantidad necesaria
Manteca 40 g
Harina de maíz 200 g
Leche 600 cm3
Para la salsa de tomate:
Cebolla 1 Unidad
Oliva Cantidad necesaria
Pimienta
Pure tomates 2 Tazas
Sal
Zanahoria 1 Unidad
Tomates concasse 6 Unidades
Ajo 1 Diente
Para las albóndigas:
Harina Cantidad necesaria
Pimienta negra Cantidad necesaria
Sal 1 Pizca
Salsa picante Cantidad necesaria
Queso azul 200 g
Pan viejo rallado 3 cdas.
Ají molido 1 cda
Perejil fresco 2 cdas.
mostaza 1 cda
Carne picada de res 250 g
Carne de cerdo picada 250 g
Ajo 1 Diente
Huevo 1 Unidad
Cebolla 1 Unidad
Preparación
Para comenzar, salteamos el ajo y la cebolla en una sartén con un poco de aceite de oliva. Luego, llevamos a un bowl y le agregamos la carne de cerdo picada, la carne de res. Mezclamos y agregamos mostaza, pan rallado, el perejil fresco picado, huevo, y condimentamos con sal, pimienta, ají molido y salsa picante.
Armamos las albóndigas y en el centro colocamos un buen pedazo de queso azul. Cerramos y le damos forma de bolitas. Pasamos por harina.
Para la salsa de tomate, picamos el ajo, la cebolla y los sudamos en una sartén con aceite de oliva.
Agregamos la zanahoria en cubos, el tomate concasse y el puré de tomates. Condimentamos con sal y pimienta. Dejamos cocinar durante unos minutos, agregamos agua o caldo si fuera necesario.
Por otro lado, doramos las albóndigas y llevamos a la sartén con la salsa de tomate para terminar allí su cocción.
Preparamos una polenta. Para ello, hervimos la leche y vamos agregando la polenta en forma de lluvia, revolviendo todo el tiempo para que no se pegue. Agregamos la mantaca. Una vez cocida añadimos la mitad del queso, hasta que se integre.
Servimos en una tabla, agregamos la otra mitad del queso, hacemos un hueco en el centro y volcamos las albóndigas ahí. Terminamos con perejil fresco.
Armamos las albóndigas y en el centro colocamos un buen pedazo de queso azul. Cerramos y le damos forma de bolitas. Pasamos por harina.
Para la salsa de tomate, picamos el ajo, la cebolla y los sudamos en una sartén con aceite de oliva.
Agregamos la zanahoria en cubos, el tomate concasse y el puré de tomates. Condimentamos con sal y pimienta. Dejamos cocinar durante unos minutos, agregamos agua o caldo si fuera necesario.
Por otro lado, doramos las albóndigas y llevamos a la sartén con la salsa de tomate para terminar allí su cocción.
Preparamos una polenta. Para ello, hervimos la leche y vamos agregando la polenta en forma de lluvia, revolviendo todo el tiempo para que no se pegue. Agregamos la mantaca. Una vez cocida añadimos la mitad del queso, hasta que se integre.
Servimos en una tabla, agregamos la otra mitad del queso, hacemos un hueco en el centro y volcamos las albóndigas ahí. Terminamos con perejil fresco.
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